Ayer escuchamos lo que le pasó a Pedro con Jesús en el lago…
¿lo recordáis? Pedro se fió de Jesús y se puso caminar hacia él en el lago.
Escuchó a Jesús que le llamaba, no tuvo miedo y se fío de Él… sin embargo,
después le pasó algo que lo complicó… Vamos a escucharlo…
ESCUCHAMOS LA
PALABRA DE JESÚS:
Mateo 14, 29-33
«Pedro bajó de la barca y echó a andar sobre el agua
acercándose a Jesús: pero, al sentir la fuerza del viento, le entró miedo,
empezó a hundirse y gritó: “Señor, sálvame”. Enseguida Jesús extendió la mano,
lo agarró y le dijo: “¡Hombre de poca fe! ¿Por qué has dudado?”. En cuanto
subieron a la barca amainó el viento. Los de la barca se postraron ante él
diciendo: “Realmente eres Hijo de Dios”». Palabra de Dios
A Pedro le pasó lo que nos pasa a todos algunas veces; que
dudamos, que tenemos miedo, que nos sentimos solos, que no sabemos seguir a
Jesús como querríamos… Pero Jesús, como un buen pastor, no le deja solo ¡nunca!
Al contrario, se acerca a él, le da la mano, le ayuda, le salva…
ORACIÓN
Gracias, Jesús, porque me salvas, porque nunca me dejas,
porque siempre me ayudas. Gracias porque siempre puedo contar contigo, Jesús.
Gloria al Padre, al Hijo…
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